Para lograrlo, Coralia diseñó una metodología específica que permitió una estimación altamente precisa de las emisiones indirectas asociadas a las materias primas utilizadas en la producción. A diferencia de los enfoques tradicionales que se apoyan en bases de datos internacionales con valores promedio, el equipo trabajó en detalle con información representativa para cada insumo, considerando tanto los métodos de producción como el país de origen real. Este enfoque redujo significativamente la incertidumbre y fortaleció la calidad técnica del análisis.

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El proyecto no solo entregó resultados concretos sobre la huella de carbono de la línea terapéutica Dermaglós, sino que también contribuyó a generar un conocimiento más amplio para la industria. A partir de este trabajo, Coralia sigue ampliando su propia base de datos de huellas de carbono de materias primas del sector cosmético. Esta herramienta funciona como un recurso estratégico para futuras mediciones, garantizando mayor precisión y transparencia en los cálculos ambientales. La experiencia con Dermaglós terapéutica refuerza una colaboración que comenzó con la línea Aveno y que continúa creciendo con nuevos desafíos. Con cada proyecto, Coralia y Laboratorios Andrómaco consolidan un camino de innovación ambiental que combina rigor científico, compromiso corporativo y una contribución tangible a la sostenibilidad.